La esencia de Marruecos

Día 1: España - Marrakech
Vuelo con destino Marrakech. Llegada a Marrakech, recogida en aeropuerto y traslado al alojamiento. Resto del día libre para descubrir la “ciudad roja”. La caída de la tarde en cualquier ciudad o pueblo de Marruecos supone todo un espectáculo y en Marrakech más si cabe. La gente se echa a la calle y en la plaza de Jemma el Fna, declarada Patrimonio Cultural Universal por la UNESCO, se pueden ver acróbatas, cuenta-cuentos, vendedores de agua, bailarines y músicos. Este lugar es perfecto para tomar el pulso de la ciudad, viendo cómo se transforma y se llena de colorido. También para disfrutar de una cena en los puestos que se montan al anochecer en la plaza convirtiéndola en un gran restaurante al aire libre, esta es una de las cosas más típicas de Marrakech para turistas y locales.

Día 2: Marrakech - Casablanca - Rabat - Fez
Desayuno y, muy temprano, salida hacia Casablanca. Tiempo para visitar el interior de la mezquita de Hassan II, la más alta del mundo y la segunda más grande tras la Meca. Después continuaréis hacia Rabat, la capital administrativa de Marruecos, para dar un paseo por su medina y ver la "torre de Hassan", hermana de la Kotubia de Marrakech y la Giralda de Sevilla. Seguiréis camino hacia Fez, conocida como la capital cultural y espiritual de Marruecos, centro del arte y la ciencia. Patrimonio de la humanidad por la UNESCO. Es la pionera en el culto musulmán en Marruecos y posee una de las universidades más antiguas del mundo. Alojamiento en riad. Nota: En las salidas a partir del 1 de diciembre de 2018, no se visitará Casablanca.

Día 3: Fez
Desayuno. Día completo para disfrutar de esta maravillosa ciudad, la primera en ser considerada capital del imperio. La Medina de Fez el-Bali es uno de los mayores emplazamientos medievales que existen en el mundo, es un lugar mágico lleno de vida. Visita de la antigua madraza (escuela coránica), la fuente Nejjarine, la mezquita Karaouyinque (actual sede de la universidad de Fez) y el Mausoleo de Moulay Idris. Junto a la vieja ciudad amurallada está Fez el-Jdid, antigua sede de la comunidad judía. La Mellah (barrio judío) fue la primera en establecerse como tal en Marruecos cuando los judíos, fueron trasladados desde la parte antigua de Fez a Hims, construida en un lugar conocido como al-Mallah, "El salinar" . Con el tiempo este término se usó para designar a los barrios judíos de las ciudades de Marruecos. Es el barrio estructurado más antiguo de Marruecos. Aquí podréis apreciar la diferente arquitectura de este barrio con sus características callejuelas, sus balcones y aperturas al exterior decoradas con elementos en madera. Y por supuesto pasear por las callejuelas para descubrir los curtidores, tintoreros y artesanos. Alojamiento en riad.

Día 4: Fez - Ifran - Azrou - Midelt - Erg Chebbi
Tras el desayuno saldremos hacia Ifrane, conocida como la "pequeña suiza", ya que la arquitectura de esta pequeña ciudad de montaña no tiene nada que ver con la tradicional del país. Nuestro camino nos llevara después a Azrou otra encantadora ciudad rodeada de bosques de cedros con monos. Continuaremos hasta Midelt, en las faldas del monte Ayachi. Su situación como cruce de caminos hace de esta ciudad un importante mercado para agricultores, ganaderos y artesanos de la piedra y los fósiles. Pasaréis junto a los impresionantes palmerales del valle de Ziz y poco a poco iréis notando como el paisaje es cada vez mas desértico hasta llegar a las dunas del Erg Chebbi. Llegada al hotel junto a las dunas y algo de tiempo para dejar las cosas y preparase para el paseo en dromedario y admirar el mágico atardecer del desierto. Mas tarde, podréis disfrutar de una magnifica cena y de la música de los tambores bereberes. Nota: posibilidad de pasar la noche en una típica jaima (tienda bereber) con ida y vuelta al campamento en dromedario. (Consultad disponibilidad y suplemento).

Día 5: Dunas del Erg Chebbi - Gargantas del Todra - Valle del Dades - Ait Ben Haddou
Tras el desayuno salida hacia el valle del Dades. Poco a poco iréis abandonando el paisaje desértico para ir encontrando preciosos palmerales como el de Tineghir. Allí os desviaréis para dar un pequeño paseo por las gargantas del Todra con sus desfiladeros de hasta 300m. Regresaréis a la ruta para, un poco más adelante ya en el valle de las rosas, desviaros para disfrutar de las impresionantes vistas que ofrece la carretera de las gargantas del Dades. Volveréis de nuevo a la conocida como “Ruta de las mil Kasbahs” para seguir camino hasta Ouarzazate con su Kasbah Taourirt, antigua residencia del Pashá de Marrakech. Apenas a unos kilómetros encontraréis el final de etapa de hoy, la kasbah de Ait Ben Haddou. Cena casera y alojamiento en riad.

Día 6: Ait Ben Haddou - Marrakech
Después de desayunar daremos un bonito paseo por este mágico lugar que, en 1987 fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO y que es el pueblo fortificado (ksar) más famoso y mejor conservado de Marruecos. En esta kasbah, que domina el valle de Ounilla, se han grabado infinidad de películas, como Lawrence de Arabia, la momia o Alejandro Magno, entre otras. Más tarde os pondréis en marcha para atravesar el Atlas por el puerto de montaña de Tizi N’Tichka con 2.260m de altitud y unas increíbles vistas. Os acompañarán por el camino poblados bereberes, granjas y paisajes espectaculares hasta llegar a Marrakech. Llegada y alojamiento en riad. Resto del día libre.

Día 7: Marrakech
Tras desayunar podéis salir para disfrutar de la ciudad durante todo el día. Marrakech fue capital para varias dinastías, los almorávides, los almohades y los saadíes. Sus orígenes no están claros, pero se cree que empezó siendo un campamento militar establecido por el jefe almorávide Abú Bekeren en 1070. Su sucesor, Yousef Ben Tachfin, comenzó la tarea de convertir este oasis en una capital digna de su imperio, que se extendía desde el Atlántico hasta Argelia y desde el Sahara hasta el Ebro. Visita de la Madraza de Ben Yousef, en su tiempo la más importante del norte de África. A continuación visita del palacio de Bahia, construido a finales del siglo XIX por Si Moussa, gran visir del sultán, que dedicó este magnífico palacio a su favorita, Bahia significa de la bella o la brillante. Continuareis paseando por la mellah y las callejuelas de la medina. Resto del día libre para descubrir rincones de esta sorprendente ciudad, aprovechar para ir a un hamman, hacer algunas compras o tomar algo en alguna de las estupendas terrazas.

Día 8: Marrakech - España
Desayuno y, dependiendo del vuelo, tiempo para las últimas compras. Traslado al aeropuerto y vuelo de regreso a España.
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